“La mujer tiene un potencial muy grande, hay mujeres extraordinarias, muchas son importantísimas. Poco a poco, se va a ir logrando que haya más mujeres astronautas que van a cumplir su sueño, como el que tenía Juanita.”
Dr. Rodolfo Neri Vela
La historia de Juana Márquez Hernández, mujer originaria de Veracruz, inicia cuando decide perseguir su más grande sueño; ser la primera astronauta de México, en el año 1985, proeza que sería muy difícil de lograr al tener en cuenta que las mujeres no asumían un papel relevante en un campo completamente dominado por hombres. El documental “Juanita, más allá de las fronteras” nos acerca a la vida de una mujer que a pesar de las adversidades no abdicaría a la posibilidad de viajar al espacio y se abriría camino con sus méritos para ser un ejemplo de persistencia y así motivar a mujeres y niñas.
Juanita desde muy chica fue una ávida lectora, no le importaba si eran narraciones literarias o históricas, en los libros encontraba un gran placer. Su grande pasión la forjó y la hizo una mujer fuerte y comprometida con sus estudios, ella trabajaba en el día y estudiaba la secundaria por las noches sin descuidar nunca sus preciadas lecturas. Debido a su inquietud por el espacio se inscribió al concurso “Viajero espacial” y se entusiasmó al descubrir que cumplía con todos los requisitos, gracias a esto logró pasar todas las pruebas con elogios y felicitaciones, en ese momento supo que era capaz de conseguir lo que se propusiera. Juanita expresa que su mayor consuelo fue saber que había clasificado aunque no resultara electa como pasajera espacial.
Otra de las finalistas del concurso fue Vivianne Solis Wolfowitz, que siempre tuvo un gran deseo de viajar al espacio y tanto era su interés que tomó clases de Astronomía y también estudió Biología marina para poder realizar investigaciones sobre especies invertebradas. Vivianne tenía una premisa muy clara en su vida: “Nunca hay que dejar de soñar con las estrellas” y agrega que en su caso tampoco dejó de soñar con el mar. Es el consejo que después de su experiencia puede brindarle a las mujeres y niñas para que no renuncien a sus sueños porque hasta los que parecen imposibles se pueden realizar, no olvidando que el trabajo y esfuerzo siempre están de por medio.
El cortometraje donde se muestra parte de su vida, sus aspiraciones y sus esperanzas fue dirigido por la cineasta y nieta de Juanita, Elena Franco; ganadora del concurso internacional Cine Space 2018 de la NASA y Houston Cinema Arts Festival, su participación destacó de entre 238 competidores de más de 52 países. La cineasta menciona que al ser contadora de historias lo que busca es relatar vidas que motiven a la gente y le den esperanza para lograr sus propósitos, por tal motivo contar la experiencia de Juanita se volvió necesario al ser una mujer que puede inspirar a muchas otras.