La inteligencia artificial es un hecho sin retorno que avanza rápidamente y se congrega como el gran paso hacia el futuro. Con los avances cada vez más sofisticados es posible simular las funciones de la mente humana mediante un software que permita representar el lenguaje, los movimientos, gestos y expresiones del ser humano. Aunque aún no son autómatas, pueden establecer una conversación como cualquier otro individuo y programarse para realizar distintas actividades.

Philip K. Dick  creó una de las novelas más conocidas del género ciberpunk, un artista que afirmaba en su literatura su deseo por crear mundos ficticios ante el disgusto que sentía por un mundo que no coincidía con sus estándares, y un visionario que probablemente nunca imagino que sus narraciones podrían anticiparse tanto a la era digital y tecnológica que ahora estamos viviendo. ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? Es el título de la novela que inspiro a una de las obras maestras del cine, Blade Runner dirigida por Ridley Scott y protagonizada por Harrison Ford. En las páginas de esta novela se relata un mundo ambientado en el año 2021 donde la guerra mundial causó estragos irremediables y exterminó a millones de personas, ante esta precaria situación los sobrevivientes anhelan cualquier criatura viva que les brinde prestigio, les permita conectarse con sus emociones y así poder salvar lo poco que les queda de humanidad; sin embargo este es un lujo que tan solo una minoría puede darse, por lo tanto se ven obligados a adquirir réplicas impresionantemente realistas. Las empresas enfocadas a esta práctica incluso fabrican seres humanos. Rick Deckard, un cazarrecompensas, dedica sus días a cazar androides que ocasionan problemas en la ciudad por su falta de control y una rebeldía que llega a ser peligrosa. Su tarea se complicará cuando enfrente a un modelo de androides sumamente desarrollados a los que llaman Nexus 6 que son prácticamente indistinguibles de los seres humanos. Tres aspectos que pueden hacerlos diferentes son: una inteligencia superior, su falta de sentimientos y una  carencia de identidad. Pero, ¿será que estos androides podrían ser más humanos que los humanos?

_{Imagen extraída de la película Blade Runner (1982).}

Pensar en Inteligencia Artificial, o bien en robots, androides y genoides autómatas, irremediablemente lleva a la imaginación de un mundo distópico, donde el temor es el principal sentimiento del ser humano, al crear máquinas incapaces de controlar su inteligencia. Es por eso que aunque el humano genere ordenadores más inteligentes, no se le concederá la voluntad propia, para que de esta manera la máquina no exprese un deseo de libertad.