Una de las maneras en que la NASA está impulsando la creación de nuevas empresas espaciales en Estados Unidos es a través del Programa CLPS, o Servicios Comerciales de Cargas Útiles Lunares. Creado en 2018, CLPS estará invirtiendo 2,600 millones de dólares durante 10 años para contratar empresas privadas para que lleven a la Luna cargas útiles de interés de la NASA a través de misiones robóticas, con la intención de recolectar datos para apoyar al proyecto Artemis. Con este programa, la NASA espera que las empresas se hagan cargo de todas las actividades necesarias para integrar, transportar y operar con seguridad las cargas útiles de la NASA, incluidos los vehículos de lanzamiento, las naves lunares y los sistemas de apoyo en la superficie lunar. Es decir, la NASA dará completa libertad a las empresas para que generen sus soluciones con una intervención mínima en la operación de las misiones. La NASA solo define los sitios de aterrizaje y los instrumentos que llevar.También, la NASA permite que las misiones contratadas por CLPS lleven cargas útiles de otros clientes. Todo esto es un cambio de paradigma en las misiones espaciales que pretende crear una nueva economía espacial.
Misiones CLPS
Hasta la fecha, la NASA ha calificado a unas 14 empresas para participar en el programa CLPS, y ha otorgado contratos a cuatro compañías para que realicen un total de siete misiones de alunizaje CLPS entre 2022 y 2024. La mayoría de las misiones durarán un máximo de un día lunar, es decir 14 días terrestres, debido a los que las bajas temperaturas de la noche lunar (-150 C) son un impedimento para el funcionamiento de las baterías de los equipos.Estas son las siete misiones:
Primera misión de Astrobotic
Programado para el cuatro trimestre de 2022, el alunizador Peregrine 1 de Astrobotic llegará Lacus Mortis, otra región de lava luna. Peregrine 1 transportará 28 cargas útiles, entre las que están 11 instrumentos de NASA y misiones de ocho países, incluyendo la Misión Colmena de México. Entre los instrumentos más importantes está un espectrómetro de masas que se dedicará a medir la cantidad de agua y otros volátiles que se emergen del suelo lunar por efecto del viento solar. Esta información es muy valiosa para comprender los procesos de transporte de agua en la Luna.
Primera misión de Intuitive Machines
A finales de 2022, el alunizador Nova-C de Intuitive Machines llevará cinco cargas útiles de la NASA y una carga comercial a Vallis Schroteri. Entre otros instrumentos, el Nova-C llevará cámaras estéreo para registrar cómo los gases de su sistema de propulsión impactan en la superficie lunar. Lo anterior para cuantificar los efectos de la dispersión del polvo lunar durante los futuros alunizajes y proteger a las futuras misiones.
Segunda misión de Intuitive Machines
En su segunda misión a la Luna en 2023, Intuitive Machines llevará el taladro PRIME-1 de la NASA y un espectrómetro de masas al polo sur de la Luna a bordo de otro alunizador Nova-C. La intención es perforar al suelo lunar hasta una profundidad de un metro para buscar hielo de agua. El Nova-C también desplegará un rover para probar una red de comunicaciones inalámbricas 4G/LTE desarrollada por Nokia. También probará un rover saltarín llamado Micro-Nova que tomará imágenes de alta resolución de la Luna mientras salta sobre la superficie de la Luna.
Primera misión de Masten Space Systems
En noviembre de 2023, el alunizador Xelene de Masten Space Systems llegará al polo sur lunar con al menos al menos ocho instrumentos para detectar hielo de agua y otros volátiles como metano y dióxido de carbono. Xelene también desplegará el rover autónomo del tamaño de una caja de zapatos de Astrobotic llamado MoonRanger.
Segunda misión de Astrobotic
A fines de 2023, Astrobotic llevará el rover VIPER de la NASA al polo sur de la Luna. El rover explorará áreas dentro y alrededor de regiones permanentemente sombreadas durante más de 100 días. Utilizará un taladro y tres instrumentos para determinar la composición de los depósitos de hielo de agua de la Luna y evaluar su tamaño y accesibilidad. Para esta misión, Astrobotic empleará el alunizador Griffin, el módulo de aterrizaje lunar más grande desde el Módulo Lunar Apolo.
Primera misión de Firefly
En 2024, Blue Ghost, el primer módulo de aterrizaje lunar de Firefly descenderá en las llanuras de lava de Mare Crisium en 2024, con 10 cargas útiles, con una masa total de 94 kilogramos. Estas cargas útiles incluyen una sonda para medir el flujo de calor del interior lunar y un generador de imágenes de rayos X para estudiar la interacción de la magnetosfera de la Tierra con el viento solar, una demostración de un sistema informático tolerante a la radiación y un experimento para probar la capacidad de usar señales de GPS a distancias lunares.
Tercera misión de Intuitive Machines
El tercer alunizaje de Intuitive Machines será en la región de Reiner Gamma en 2024. Llevará cuatro cargas útiles de la NASA, así como un satélite de retransmisión de datos y cargas útiles secundarias por determinar. Lunar Vertex, la carga útil principal de la misión, es un conjunto de espectrómetros y magnetómetros y un rover que estudiará el ambiente de plasma y polvo de la superficie lunar, y mapeará la fuerza y dirección de los campos magnéticos. Un alunizador Nova-C también desplegará cuatro pequeños rovers CADRE de la NASA, que navegarán de forma autónoma para colectar datos de la región bajo estudio.
Un nuevo paradigma
La intención de la NASA con el programa CLPS es fomentar la innovación espacial a través de impulsar los proyectos comerciales. Es una apuesta a que las empresas contratadas desarrollen soluciones efectivas y a precios competitivos para estimular más desarrollo espacial. Desde luego, es posible que algunas de las misiones fallen. Esto es un proceso natural. Sin embargo, algunas de ellas serán exitosas y generarán innovaciones que podrán utilizarse en misiones posteriores. Toso esto generará un circulo virtuoso que desarrollará una vigorosa economía lunar. El programa CLPS es un ejemplo a seguir por todas las naciones que desean incrustarse en la nueva economía del espacio. Esperemos que muchos países emulen este modelo y aceleren su desarrollo en el sector. No cabe duda que estamos viviendo tiempos muy interesantes y seremos testigos de muchas sorpresas por venir.