La idea de un viaje tripulado a Marte ha existido desde hace muchas décadas, pero no fue sino hasta hace pocos años que el tema cobró más fuerza entre la comunidad científica y el público en general. A principios del 2010, Charles Bolden, Administrador de NASA, declaró: “El destino final en nuestros esfuerzos de exploración en nuestro sistema solar, es Marte”. NASA anunció que se enfocará al desarrollo de tecnología para futuras exploraciones espaciales, incluyendo una misión tripulada al planeta rojo.
Las simulaciones espaciales de Marte en la Tierra llevadas a cabo en ambientes parecidos a los de la misión real, son la forma más segura de probar todas las variables y riegos que la misión conlleva. Para un viaje de este tipo, no solo es necesario el desarrollo de tecnología, sino también entender una amplia gama de temas, como los cambios en el cuerpo y mente humanos en ambientes extremos, la interacción entre la tripulación y tierra con el retraso, por la distancia, de hasta 20 minutos en la comunicación, la protección planetaria y cómo se podría evitar contaminar la superficie marciana, cómo se podrían mejorar los sistemas de soporte vital para mantener a la tripulación sana y con vida durante una misión de muchos años sin reabastecimiento de comida, y muchos más.
En el 2009 tuve la oportunidad, junto con un grupo multidisciplinario y multicultural de la International Space University (ISU), de recabar información sobre estudios análogos, y simulaciones espaciales, encontrando más de 60 estudios que se han enfocado en distintos puntos de psicología, robótica, actividades extra vehiculares, fisiología, sistemas de soporte vital, arquitectura, diferentes tipos de gravedades, locaciones y duración de experimentos. Esta recopilación y revisión de estudios análogos, fue premiada por NASA, confirmando el interés de esta agencia, por el desarrollo de sistemas análogos para el aseguramiento de exitosas misiones espaciales.
¿Marte en la Tierra?
La investigación avanzó. Se encontró que hay muchos aspectos de un viaje tripulado a Marte que no se han probado y no se han considerado en los pasados estudios análogos. Seleccionando 30 de estos aspectos, propusimos una serie de estudios, tomando en cuenta la efectividad con la que cubren la amplia gama de aspectos de este viaje, el costo de llevar acabo tal estudio, y el nivel político y de colaboración internacional que requeriría. Uno de estos estudios fue el llamado “Martian Feeling”, que proponía el uso de la Estación Espacial Internacional (ISS por sus siglas en ingles) para una simulación de un viaje de ida y vuelta a Marte. Este estudio, se presentó en varios simposios, incluyendo el MARS-ISS 2012, y “ISS: Maximizando el retorno de la extensión de operaciones”, y fue publicado por el Journal of the British Interplanetary Society. Sin duda la ISS es el laboratorio en el que se podría simular un viaje a Marte con una mayor fidelidad, y actualmente en NASA existe el programa llamado ISTAR – ISS Test bed for Analog Research – que estudia la posibilidad de implementar en la ISS algunos aspectos de simulación para un viaje de larga duración, como el de tener cierto tiempo de retraso en la comunicación entre la tripulación y la Tierra. Los directivos de Mars500, dieron críticas positivas, comentando que podría ser interesante llevar a cabo un estudio como Mars500 a bordo de la ISS.
Mars500 fue un estudio en el que se simulo un viaje redondo a Marte, manteniendo en aislamiento a una tripulación de seis personas en una nave muestra, por 520 días en el Instituto de Problemas Biomédicos (IBMP) en Moscú. Este estudio llevado a cabo en el 2010, simuló también la parte de exploración del planeta Rojo, la cual fue llevada a cabo por dos de los seis tripulantes. Mars500 simuló 20 minutos de retraso en comunicación, y todo el entrenamiento, los experimentos, las rutinas, y la dieta que los tripulantes recibieron, fueron iguales a las que reciben los astronautas a bordo de la ISS. Durante Mars500, participé en un grupo de estudio bajo la dirección de la Dr. Berna Baarsen, para obtener datos y ayudar al análisis de la tripulación en la dinámica de grupos y efectos psicológicos relacionados con el aislamiento y la soledad que se pueden desarrollar durante una misión de tan larga duración. Aproximadamente, se requerirían de 520 días para llevar a cabo un viaje de ida y vuelta a Marte. En esta ocasión, fueron solo hombres quienes participaron en Mars500, sin embargo, para un viaje real a Marte se debate la idea de tener una tripulación mixta.
Uno de los grupos que ha llevado acabo simulaciones de larga duración recientemente es el Foro Espacial de Austria (OeWF por sus siglas en alemán). En los últimos años, el OeWF ha estado desarrollando un traje espacial de prueba, el Aouda.X. Este traje cuenta con todos los sistemas de soporte vital, reconocimiento de voz, y una pantalla integrada al casco que muestra información útil en tiempo real. En el 2011, llevaron a cabo una simulación en las minas de Rio Tinto en España, donde el suelo tiene similitudes al suelo Marciano, como es la presencia de jarosita, un mineral de hierro y azufre también encontrado en Marte. La simulación de Rio Tinto tuvo una duración de una semana, en donde se probaron las diferentes capacidades y funciones del trabajo con el traje Aouda.X, como exploraciones del suelo e interacción con diferentes vehículos llamados “rover” incluyendo el Eurobot de la Agencia Espacial Europea; rover avanzado que es capaz de operar por sí solo, o ser manejado por un astronauta y el cual fue probado por primera vez fuera de los laboratorios en esa ocasión. El OeWF permite que diferentes grupos de investigación puedan también participar durante la misión probando sus propios equipos, por lo cual tuve la oportunidad de formar parte del equipo de White Label Space, que participa en el Google Lunar X-prize, al poner a prueba el simulador de la nave lunar (Lunar Lander), y las cámaras hemisféricas del rover en desarrollo.
En el 2012, OeWF, realizo otra simulación, en esa ocasión, en las gélidas cuevas de la región de Dachstein en Austria. Se cree, que en Marte se encontrarían este tipo de cuevas con hielo, por lo que es interesante analizar la posibilidad de comunicación con los astronautas desde el fondo de estas. Recientemente, la OeWF realizo una simulación en un desierto en Marruecos: 2013 Mars Analog Field Simulation, con duración de un mes, en donde se probó la comunicación con retardo de 20 minutos de ida, y 20 minutos de regreso. Esto sin duda, agregó un grado de complejidad que se debe de estudiar muy a fondo antes de un viaje a Marte.
Durante la Semana Mundial del Espacio 2013, participé en la simulación de exploración a Marte que la OeWF realizó en conjunto con la Mars Society, quienes dirigen un sitio de simulación en los Estados Unidos en el estado de Utah, llamado Mars Desert Research Station (MDRS). Durante esta semana, una tripulación de cinco personas estuvo en el MDRS, dirigiéndose toda la simulación desde el Centro de Control de Misión en Innsbruck, Austria. La tripulación realizó experimentos para analizar el tiempo de diferencia entre actividades extra vehiculares con o sin traje espacial, detección de cambios que se pudieron presentar en el suelo en los últimos años, y muestras de arena. La actividad más sobresaliente que se realizó, fue la simulación de exploración en tiempo real, entre tres distintos tipos de traje espacial, en tres distintas locaciones –Utah, Dakota e Innsbruck-, coordinados todos por el centro de control en Innsbruck, y con comunicación entre los que portaban los trajes. Los participantes fueron, Aouda.X del OeWF, NDX-2 de la Universidad de North Dakota, y MDRS del Mars Society. Esta fue la primera vez que se llevó a cabo una simulación de este tipo, y los resultados servirán para mejorar en un futuro el diseño de trajes espaciales para exploración en Marte, así como la coordinación entre actividades extra vehiculares múltiples.
Se requieren más estudios para prepararnos para un viaje tan largo como el que será cuando el ser humano visite Marte, y que tengan la mayor seguridad. Actualmente HI-SEAS está buscando candidatos para una simulación que se llevara a cabo el próximo año en Hawaii. Sin duda, es un tema amplio y bastante interesante, donde se está llevando a cabo mucha investigación para mejorar los futuros viajes espaciales tripulados.