Hasta hace unos años, los proyectos espaciales estaban reservados únicamente a las agencias espaciales nacionales y a las grandes empresas de defensa. Esto se debe a que los proyectos espaciales son costosos, tardados y riesgosos: El desarrollo de una misión espacial desde cero requiere al menos de dos años, de la participación de profesionales especializados de muchas disciplinas y del uso de instalaciones complejas y costosas para diseñar, construir y probar; así como una coordinación muy estricta entre todos los actores y el apego a estándares de seguridad y calidad. Asimismo, es necesario atender asuntos regulatorios y de trámites relacionados con la misión, como la obtención de licencias para el uso de frecuencias radioeléctricas, entre otros. Finalmente, es necesario encontrar quien lance la nave espacial y posteriormente operar la misión. Si a esto le agregamos que todo este proceso está lleno de riesgos e incertidumbres, no es raro que las empresas pequeñas y medianas no se aventuren a desarrollar proyectos espaciales.
En la actualidad, esto está cambiando. Impulsada por la convergencia de las TICs con el desarrollo espacial, la estandarización de los subsistemas espaciales y su disminución en costo y tamaño, así como el aumento en su desempeño y confiabilidad, ha detonado la aparición de un ecosistema de empresas especializadas en alguna parte del desarrollo espacial que cooperan entre sí. Esto ha provocado un círculo virtuoso que ha hecho que la demanda de satélites esté escalando en los últimos años. Esta demanda a su vez, está impulsando la creación de nuevos modelos de negocios para reducir las barreras de entrada a las aplicaciones espaciales, para permitir que quien desarrolle un proyecto espacial únicamente se enfoque al uso de los datos que proporciona el espacio y no tenga que involucrarse en el proceso completo de desarrollo. Entre los nuevos modelos de negocio que están emergiendo en el sector espacial está el conocido como Misión como Servicio o MaaS, por sus siglas en inglés.
El concepto de Misión como Servicio pretende derribar las barreras de ingreso al sector espacial al ofrecer soluciones llave en mano a los usuarios de proyectos espaciales de manera que éstos se enfoquen únicamente a su aplicación sin tener que hacerse cargo de los detalles del desarrollo de un proyecto espacial. El usuario únicamente paga por el servicio que requiera, mientras que el proveedor se encarga de proporcionar la infraestructura espacial y puede apoyar al cliente en la operación. Este modelo es similar al de infraestructura como servicio que se emplea en el ámbito de la tecnologías de información y comunicaciones, en donde el cliente renta el servicio que requiere, ya sea capacidad de procesamiento, almacenamiento o transporte de datos a un proveedor que ofrece estos servicios en la nube y paga únicamente lo que consume.
Algunos actores
Entre las empresas que están ofreciendo el modelo de Misión como Servicio, están las siguientes:
Loft Orbital
Asentada en San Francisco, California, Loft Orbital es una empresa de reciente creación dedicada a ofrecer soluciones de observación de la Tierra través de una constelación de 5 satélites de entre 50 y 150 Kg de observación de la Tierra que están siendo desarrollados por un proveedor calificado y serán puestos en órbita próximamente. Su modelo de negocios es rentar un satélite como servicio, a través de cobrar una tarifa anual en un modelo de pago por desempeño. El cliente opera el satélite y tiene asignado un territorio exclusivo en donde puede tomar las imágenes que desee. Si el cliente lo prefiere, Loft Orbital puede proporcionar el hospedaje de su propia carga útil y gestionar todos los aspectos para conseguir que la carga útil orbite.
Astro Digital
Con sede en Santa Clara, California, Astro Digital ofrece a sus clientes diferentes servicios para desarrollar su misión satelital. Entre ellos destaca la plataforma Corvus, una colección modular y escalable de subsistemas de satélite que permiten diseñar una misión espacial a partir de una plataforma CubeSat de 6U. Una vez diseñada la misión, Astro Digital acompaña el cliente en las subsecuentes etapas de desarrollo para asegurar su éxito.
Open Cosmos
Fundada en 2015 con apoyo de la ESA, Open Cosmos tiene su sede en Oxford, Gran Bretaña. Entre sus servicios está el uso de una plataforma de diseño en la nube denominada beeApp que permite que sus clientes se concentren exclusivamente en el desarrollo de su carga útil que utiliza los servicios de una plataforma satelital prediseñada y probada. Una vez concluido el diseño, Open Cosmos realiza la construcción, pruebas y la puesta en órbita del segmento espacial. Ya en órbita, Open Cosmos continúa brindando asistencia y operando satélites para que sus clientes se concentren en lo que necesitan: los datos y la aplicación.
Ventajas del modelo MaaS
MaaS es un concepto que reta a las empresas espaciales establecidas con un nuevo modelo de negocios que proporciona muchas ventajas para el usuario, tales como cero costo de infraestructura, menores costos de desarrollo y operación y menores riesgos que el enfoque tradicional, a la vez que permite al usuario conservar el control de las operaciones.
Al proporcionar una solución llave en mano, MaaS reduce a cero el monto de la inversión requerida y tiempo de acceso al espacio, con la ventaja adicional de reducir los costos de operación al compartir los activos del sistema con varios usuarios a la vez. A través de Maas, las organizaciones que requieran de un proyecto espacial, evitan la complejidad, el riesgo y el costo de desarrollar y poseer su propia nave espacial. Debido a estas ventajas, es muy probable que este modelo se siga desarrollando y perfeccionado en los próximos años. Todo esto podría hacer accesible el espacio a sectores que tradicionalmente ni siquiera lo hubieran soñado hace unas décadas.
