Israel Téllez

Mario M. Arreola Santander

Fecha: 2014-01-01


Hace apenas unos días el 14 de diciembre de 2013, en la bahía de Arcoíris (Sinus Iridium en latín) del Mar de Lluvia (Mare Imbrium) en el hemisferio norte Lunar, se posó la primera nave espacial China “Chang’e 3” depositando su carga el rover lunar “Yutu” (Conejo de jade) de 140 kilos sin problemas. Esto coloca a China como el tercer país en enviar con éxito un robot explorador lunar. De los países que han enviado misiones a la Luna solo tres han logrado descensos suaves sobre su superficie; Rusia, los EEUU y China.
 
China habría gastado alrededor de seis mil millones de dólares desde 1992 a la fecha, y surge la pregunta: ¿Qué busca China con un programa espacial tan ambicioso?Podemos considerar que además del prestigio que los logros espaciales chinos significan, se sabe que detrás de una decisión económica también hay una causa política, veamos.
 
Políticamente China demuestra que es capaz de lograr grandes hazañas en el espacio con sus potentes lanzadores, su estación espacial tripulada y ahora con la llegada de “Chang’e 3” a la Luna se une a la exploración espacial.

Presencia regional; es evidente que China se posiciona como la principal potencia regional, también compitiendo frontalmente en temas espaciales con la India y Japón. El tener presencia en el espacio la convierte en un “big brother” para Taiwán.
 
Capacidad tecnológica y mercado: Desde la puesta en órbita de su primer satélite en 1970, China ha desarrollado su programa espacial en relativo aislamiento, adquiriendo tecnología de Rusia principalmente. No forma parte de algún consorcio de países como la ESA o la Estación Espacial Internacional. Ha desarrollado sus propios satélites de comunicaciones y para observación de la tierra uno con Brasil. La capacidad de poner en órbita grandes cargas la colocó como competidor en el mercado de lanzadores desde 1990 con el lanzamiento del AsiaSat-1. A la fecha ha puesto en órbita más de 30 satélites extranjeros, incluyendo los de Filipinas, Nigeria, Pakistán, Venezuela y “Pegaso” el primer nanosatélite de Ecuador. China ha demostrado que puede enviar confiablemente al espacio satélites, astronautas, robots, sondas, y su propia estación espacial.

 

 

No debemos pasar por alto el ámbito militar. Se puede asegurar que el espacio proporciona superioridad estratégica a quien pueda hacer uso de este. Esta podría ser una razón más para que China se haya abierto un lugar en el espacio.



Etiquetas: Programas,Espacial,Robot,China,Luna

Revista Hacia El Espacio de divulgación de la ciencia y tecnología espacial de la Agencia Espacial Mexicana.