La arena del camino se levantaba a veces como una pequeña nube de color cenizo, otras, formaba una densa cortina amarillenta que escondía el paisaje, el camino y la camioneta que nos precedía. Disminuyendo la velocidad, Rubén el conductor, permitía que el polvo se asentara antes de proseguir. Las dos camionetas tipo Pick Up en las que hábilmente nos conducían mostraron la robustez necesaria para superar los retos de la brecha que serpenteaba entre mezquites, saguaros y rocas.