... Pero en véz de eso, logró poner los sueños y esperanzas de muchas personas demasiado lejos, en el espacio, en Marte. Ahora resulta que el viejo dicho del pobre gato no es del todo cierto. Generalmente trata de advertir a la gente sobre las consecuencias (normalmente negativas) de ser curioso. Ahora, los ingenieros y científicos de la NASA/JPL, miles de colaboradores de todo el mundo y una niña curiosa han demostrado lo contrario.