Las defensas a través de las estrellas Nuestro sistema inmune combate infecciones en dos formas: innata, con barreras como la piel y el moco nasal, y adaptativa, con células especializadas como los linfocitos B y T. Las vacunas ayudan a este sistema a reconocer y atacar amenazas específicas. En el espacio, la microgravedad y la radiación ionizante afectan al sistema inmune, reduciendo la eficacia de los glóbulos blancos y aumentando la susceptibilidad a infecciones y enfermedades. La NASA investiga estos efectos para proteger mejor a los astronautas durante y después de sus misiones.